La Revolución Bolivariana
Hablar de la Revolución Bolivariana es hablar del polémico presidente venezolano Hugo Chávez, nacido en Sabaneta, Estado Barinas, el 28 de julio de 1954, quien egresó de la Academia Militar de Venezuela, como Subteniente, el 5 de julio de 1975.
Ya desde su nacimiento, la historia venezolana comenzaría a escribir páginas, que serían los antecedentes de su llegada al poder.
El presidente Carlos Andrés Pérez, gobernó durante dos períodos. El primero, que transcurrió entre 1974 y 1979, fue de gran pujanza y crecimiento económico, sobre todo por la exportación de petróleo.
El segundo período presidencial de Pérez (1989-1993) ya no fue tan fructífero. En 1983, el precio del petróleo cayó, y el mandatario se inclinó por el neoliberalismo para encauzar la economía, fundándose en las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El ocaso del gobierno de Pérez se produjo cuando los pobres, alcanzados por el incontenible aumento de los precios salieron a las calles a reclamar por sus derechos, pero no en forma pacífica, sino por medio de actos vandálicos y saqueos, en lo que se conoció con el nombre de “Caracazo”, que se produjo el 27 de febrero de 1989. Los manifestantes fueron reprimidos con rudeza y hubo centenares de muertos.
El 4 de febrero de 1992 y el 27 de noviembre del mismo año, se produjeron dos intentos de golpes de estado, a cargo de Hugo Chávez que comenzaba a ser visto como líder entre las clases oprimidas y que fue condenado por esos hechos violentos. Sin juicio, debió soportar la prisión durante dos años.
En 1993, Pérez debió dejar el mando, al conocerse una sentencia del superior tribunal de justicia donde se lo condenaba por corrupto.
La presidencia fue ocupada en 1994 por Rafael Caldera, quien debió afrontar una profunda crisis económica. Durante su gobierno se retiraron los cargos que pesaban contra Chávez, quien fue liberado, retirándose del ejército, e iniciando el Movimiento V República de carácter político.
Como Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, asumió el poder, en 1998, apoyado por el 56% de los sufragios, y en al año 2000 fue reelecto con el 59%. Desde su asunción puso punto final al sistema bipartidista que imperaba en Venezuela. Su propósito fue impulsar un cambio de tinte socialista en su país, tomando como ejemplo las ideas de Simón Bolívar, libertador de Venezuela, Colombia, Ecuador, Bolivia y Perú, del dominio hispánico. Esas ideas son: igualdad, libertad e integración de América Latina.
En 1970 se había formado el ejército bolivariano 200 (EB-200) en el que Chávez tuvo gran participación, con el fin de lograr una Venezuela autónoma, cuyo gobierno satisfaga las necesidades de su pueblo. Según el ideario del grupo, la población debe participar en el gobierno a través de referéndum y recibir equitativamente una parte de las riquezas que ingresen a través del petróleo. En 1982 el ejército bolivariano añadió a su denominación la de revolucionario.
Este ejército bolivariano no nació con una idea revolucionaria sino que se fue gestando poco a poco, para asumir la forma de un socialismo nuevo, cristiano, solidario, ético y antiimperialista, que impida la dominación de los países económicamente poderosos.
Llegado al poder, Chávez, realizó una serie de misiones o programas sociales, que incluyen en el aspecto educativo, planes de alfabetización, de educación básica y de preparación para estudios superiores. En el orden de los servicios elementales, trazó un plan de construcción de viviendas, de servicios médicos y la distribución de alimentos. Además promovió el campo y luchó contra la discriminación de sectores de aborígenes. Inició la expropiación de terrenos improductivos a terratenientes, a partir del año 2005, y los adjudicó a campesinos humildes. Como parte de su plan de ayuda social creó el Banco del Pueblo, el Banco de la Mujer y otorgó créditos para micro-emprendimientos.
La Constitución de 1999, aprobada el día 15 de diciembre, elaborada desde el gobierno fue aprobada mediante referéndum, por un 71,23% de ciudadanos y dio un nuevo nombre al estado: República Bolivariana de Venezuela. Adiciona a los poderes tradicionales del estado, Ejecutivo, Legislativo y Judicial, el Poder Electoral y el Ciudadano, conforme a su política de mayor participación de la ciudadanía en el gobierno.
Creó en el año 2002 los círculos bolivarianos, con actuación dentro y fuera del país, calificados de terroristas por sus opositores, por los métodos violentos que utilizan, con el fin de asegurar en el poder a su líder político, quien había sufrido un golpe de estado el 11 de abril de 2002. Éste golpe, respaldado por Estados Unidos, llevó de facto al poder, a Pedro Carmona, quien como primera medida de gobierno derogó la Constitución de 1999. Sólo un día duró su mandato, ya que un levantamiento conjunto popular y militar, logró sacarlo del mando inmediatamente.
Durante el período comprendido entre diciembre de 2002 y febrero de 2003 se produjeron paros petroleros, con fines políticos, que eran derrocar el gobierno democrático de Chávez, ya que no hubo reclamos económicos ni sociales.
Los militares han respaldado a Chávez en toda su gestión de gobierno aunque encuentra una gran oposición en las asociaciones patronales, en los sindicatos, (que no logró organizarlos a voluntad del gobierno, por lo cual creó sindicatos paralelos), en la Iglesia, sobre todo, en los cargos más elevados, y en los medios de comunicación.
En política internacional, se ha distanciado abiertamente de Estados Unidos, y se ha acercado a los países latinoamericanos, sobre todo a Cuba, teniendo una amistad con Fidel Castro. A partir del año 2006 Venezuela se incorporó a los países miembros del MERCOSUR.
Opositor ferviente del ALCA, que propicia la unión de toda América en un único mercado, sostiene que dicha alianza sólo favorecerá a Estados Unidos, opinión que comparten muchos países de Latinoamérica. Se distanció de México, cuyo presidente Vicente Fox, es un defensor incondicional del mercado común americano. Recordemos que México ya integra junto a Canadá y estados Unidos un bloque económico conocido como NAFTA.
En noviembre de 2005, se realizó en Mar del Plata (Argentina) la IV Cumbre de las Américas, donde Chávez realizó una reunión paralela y en oposición, acompañado por el astro futbolístico Diego Maradona, denominada Contracumbre, que recibió apoyo del presidente argentino, Néstor Kirchner. En ella, Chávez se refirió al presidente mexicano, Fox, con la denominación de “cachorro del imperio”. La situación conflictiva entre Venezuela y México trajo como consecuencia el retiro de sus representaciones diplomáticas en sendos países.
La relación con Colombia también es crítica, ya que ambos países cruzan acusaciones. Venezuela afirma que Colombia ha apoyado el golpe de estado de 2002 y Colombia que Venezuela apoya a la guerrilla que asola a su patria.
Las relaciones diplomáticas con Perú se rompieron, cuando Chávez apoyó la candidatura de Ollanta Humala en las elecciones del 2006, considerándose desde el oficialismo peruano como una intromisión de Venezuela en asuntos internos de Perú.
Los países latinoamericanos aliados de Chávez, son demás de Cuba, Argentina, Brasil, Uruguay, Ecuador, con quien realizó acuerdos petroleros, con Bolivia, desde la asunción de Evo Morales, con Chile, desde que asumió a la presidencia Michelle Bachelet, aunque en este último caso, no llegan a ser demasiado profundas, como con el resto de los países citados anteriormente.
Siendo Venezuela, país productor de petróleo, Chávez ha mantenido una política de acercamiento a los países árabes, a quienes visitó, se manifestó a favor de la causa palestina, e incentivó la realización de una cumbre extraordinaria, lo que por supuesto, no estuvo bien visto desde Estados Unidos.
En marzo de 2007, en su visita a Argentina, que coincidió con la visita de George Bush a Brasil y a Uruguay, Chávez se refirió al presidente de Estados Unidos como “un cadáver político”, en un acto, en el que habló durante casi dos horas y que se efectuó en el estadio Ferrocarril Oeste en Buenos Aires, ante aproximadamente 20.000 personas, que fueron alentadas a realizar una pita o silbatina en contra de Bush. En su discurso criticó la invasión estadounidense a Irak, a la que calificó como “una guerra de locos”. Del acto no participaron los funcionarios de primera línea del gobierno nacional argentino, aunque el presidente Kirchner recibió el agradecimiento de su par venezolano, por invitarlo, y permitirle expresarse en esa oportunidad.
Sus palabras culminaron con la siguiente frase: «América latina tiene que ser libre y hacer retroceder al caballero del imperio».
Con el presidente argentino se reunió en la residencia de Olivos donde firmaron acuerdos, sobre tecnología agroindustrial, con transferencia de esos productos de Argentina hacia Venezuela, ayuda mutua sobre provisión energética, ratificando su “vocación latinoamericanista” y Bolivia fue incorporada a la creación del Banco del Sur.