Pedro II de Rusia

Pedro II nació en San Petersburgo el 23 de octubre de 1715. Su madre era Carlota Cristina de Braunschweig-Wolfenbüttel que falleció poco después de dar a luz, y su padre el zarévich Alexis Petróvich, hijo primogénito de Pedro I el Grande y su primera esposa Eudoxia Lopujiná.

Pedro se resintió contra su abuelo, que había maltratado y causado la muerte de su padre y encarcelado y torturado a su abuela, y por haber sufrido él mismo la prisión desde niño junto a su hermana Natalia, quien fue como una madre para él. Sin embargo el destino le deparaba suceder en el trono a su abuelo.

Pedro I, el abuelo de Pedro II, se casó con Catalina I quien le sucedió en el trono, y para satisfacer los reclamos de la nobleza, de gran parte del pueblo y del Emperador Carlos VI, tío de Pedro II, nombró a éste como su sucesor teniendo solo 12 años. Su educación fue confiada al Conde Andréi Osterman y al colaborador de Catalina I Aleksandr Danílovich Ménshikov, que de hecho tomaba las máximas decisiones imperiales y que tenía la intención de que Pedro se casara con su hija María. Ménshikov fue acusado en 1727 por la antigua nobleza, su riqueza le fue confiscada y se lo deportó a Siberia.

La formación de Pedro II fue confiada entonces al príncipe y diplomático Vasili Dolgorúkov educado en el extranjero. Ambos se instalaron en Moscú donde se coronó a Pedro, tras la muerte de Catalina I, el 25 de febrero de 1728. Pedro II tenía 14 años y fue el último zar de la dinastía Románov. Sus hábitos no eran del todo saludables, ya que le gustaban la bebida, el lujo y la diversión desenfrenada.

El 29 de enero de 1730, Pedro II falleció de viruela, un día antes de la fecha fijada para su boda con la hija de su tutor, Catalina Dologorúkova.

Fue su sucesora, Anna Ioánnovna, la hija de Iván V, medio hermano de su abuelo, Pedro I.