Lizardo Montero Flores
Lizardo Montero Flores fue un militar y político peruano, Presidente del Perú entre 1881 y 1883. Nació el 27 de mayo de 1832. Originario de Ayacaba, ingresó en la Escuela Naval del Perú en 1850, fecha aproximada. Dentro de la Marina, estuvo siete años a bordo del buque “Apurímac”.
Montero Flores, desde sus inicios en la Marina, demostró un gran compromiso y dedicación por su país. Durante su tiempo a bordo del «Apurímac», participó en diversas misiones y operaciones, lo que le permitió adquirir una valiosa experiencia y conocimientos militares. Su liderazgo y habilidades estratégicas fueron reconocidos por sus superiores, lo que le permitió ascender rápidamente en la Marina.
En 1865 se pronunció a favor del Golpe de Estado a Pezet, poniéndose a las órdenes de Prado; decisión que le valió el ascenso a Capitán de Corbeta.
Fundador del Partido Civil en 1871, fue también Senador de Piura en 1879, cargo que abandonó para ponerse al frente del Ejército del Sur, declarada la guerra con Chile. Vencido en el combate naval de Angamos, peleó en las batallas de Miraflores y de San Juan en el marco de la Guerra del Pacífico que se extendió desde 1879 a 1884. Con posterioridad y tras el fracaso naval, fue designado para estar al frente de los Ejércitos del Norte.
Montero Flores fue un líder clave durante la Guerra del Pacífico, demostrando un gran valor y determinación en cada batalla. A pesar de las derrotas, nunca perdió la esperanza y continuó luchando por la libertad de su país. Su valentía y coraje inspiraron a muchos peruanos, convirtiéndolo en un símbolo de resistencia.
Ocupada Lima por el ejército chileno, un grupo de “vecinos notables” designó a Francisco García Calderón como Presidente de la República y a Montero Flores como Vicepresidente. La Presidencia duró poco tiempo ya que, al no aceptar las obligaciones impuestas por Chile para dar por finalizada la guerra, esto es, la cesión de territorios, Patricio Lynch, jefe de las fuerzas de ocupación, destituyó al Presidente, enviándolo arrestado a Chile (1881). En estas circunstancias Flores llega a la Presidencia, cargo que ejerce desde Arequipa.
Durante su presidencia, Montero Flores se enfrentó a numerosos desafíos, tanto internos como externos. A pesar de las dificultades, se mantuvo firme en su compromiso de defender la soberanía de Perú y de buscar una solución justa y pacífica al conflicto con Chile.
Afanado en proseguir la guerra junto a Bolivia, compró armas a Europa y Estados Unidos, siendo éstos últimos de quienes había recibido mayor apoyo. Durante su gestión estuvo intensamente avocado a colaborar con la resistencia dirigida por el General Andrés A. Cáceres, tanto en lo que respecta al pertrecho de armamentos como al fortalecimiento del ejército.
Arequipa fue tomada por el ejército chileno, hecho que precipita el fin de Montero como Jefe Supremo de la República, ya que se encontraba resistiendo en Puno.
Su tarea como marino aún no había terminado, en dirigió el vapor “Tumbes” en el marco del conflicto con España en 1886.
Años más tarde fue nombrado Senador de Piura, nuevamente, entre 1890 y 1894. De la misma manera, a continuación se desempeñó como vocal del Consejo Supremo de Guerra y Marina.
El 05 de febrero de 1905 con 73 años de edad falleció en Lima. Montero Flores dejó un legado de valentía, compromiso y dedicación a su país, siendo recordado como uno de los grandes líderes de la historia de Perú.