César Borgia
César Borgia nació el 13 de septiembre de 1475 en Roma. Hijo ilegítimo de Rodrigo Borgia, devenido en Papa Alejandro VI, perteneció al clan de origen valenciano. Su madre, Vanozza Cattanei fue una patricia romana, de quien nacieron, Juan, Jofré y Lucrecia, de quien César estaba enamorado.
Desde pequeño demostró tener dotes para el desempeño militar, fuerte y atlético, y de personalidad ambiciosa, estudió leyes y teología en la Universidad de Perugia, siendo nombrado Obispo de Pamplona con tan solo 17 años.
Si bien sus aspiraciones se orientaban hacia la milicia, su padre quiso para él la carrera eclesiástica. En su calidad de hijo segundo, y como era de esperarse por aquel entonces, el clero se constituyó como una posibilidad para él, reservándose el mando de los ejércitos pontificios para el primogénito, Juan.
Aún así, cuando su hermano mayor fue asesinado, las sospechas se dirigieron hacia César que, finalmente, logró hacerse del ejército. Obtuvo varios títulos y cargos a lo largo de su vida: Arzobispo de Valencia, Cardenal hasta 1498, Príncipe de Adrià y Venafi, Duque de Valentinois, de Romaña, conde, condottiero y señor de varios principados conquistados por la fuerza.
En 1499 tomó enlace matrimonial con Carlota de Albret, hermana del rey Juan III de Navarra, con quien tuvo a Luisa Borgia, hija que no llegó a conocer.
De espíritu violento, ejemplo de príncipe renacentista tomado por Nicolas Maquiavelo para El Príncipe, César Borgia logró armarse de un gran poderío militar y territorial, bajo su persona logró unificar una serie de señoríos italianos, hasta entonces dispersos, conquistando Forli, Faenza, Urbino y otros territorios de la Italia Central.
Maquiavelo lo menciona como un hombre de grandes ambiciones que, sin embargo, no supo llegar satisfactoriamente al final de su plan: teniendo en cuenta que éste había heredado cierto poder de parte de su padre, el consolidado luego por él, mediante mecanismos violentos y ofensivos, no debía dejar enemigos que pudieran temerle u odiarle. En el caso de César, su gran desacierto fue el Papado. Asesinado Alejandro VI, asumió como máximo Pontífice Pio III, quien lo hace encarcelar. Tras éste, asume otro que tampoco se inclina en su favor, Julio II, ambos personajes de origen italiano. Conviene mencionar el origen español de los Borgia y las pugnas por entonces existentes entre los diferentes clanes por la concentración de poder.
En 1506 César logra escapar, refugiándose en casa de su cuñado y asumiendo el mando del ejército de Navarra, región que estaba en guerra civil con los agramonteses y los beaumonteses, dos bandos nobiliarios que se disputaban el reino. En el marco de esa disputa, y producto de una emboscada, fue asesinado por orden del Conde de Lerín poseedor de la Villa de Viana que éste había tomado por asalto.
El 11 de marzo de 1507 en un sitio llamado Barranca Salada fue apuñalado por tres hombres, quienes lo dejaron desnudo y tirado sin que pueda identificarse a primera vista su paradero, siendo encontrado por su paje, a quien se le permitió trasladarlo y hacerle los honores funerarios correspondientes.