Felipe González
Nació en un hogar humilde, en el barrio de Heliópolis (Sevilla) el 5 de marzo de 1942. En su ciudad natal cursó sus estudios, incluso los universitarios, obteniendo el título de Licenciado en Derecho, en 1966, especializándose en Derecho Laboral, lo que le permitió conocer aún más, las penurias de la clase trabajadora.
En 1962 se afilió a las Juventudes Socialistas Sevillanas. Ingresó al PSOE (Partido Socialista Obrero Español) en 1964, apodándose Isidoro para pasar inadvertido en un partido ilegal, que no tuvo demasiado protagonismo durante el franquismo, ya que sus máximos líderes históricos estaban exiliados. En 1970, fue nombrado miembro del Comité Nacional del PSOE, en el Congreso de Toulose. En 1972, en un nuevo Congreso de Toulouse, se dividieron los miembros en los del exilio y los del interior, donde González apareció como líder de estos últimos. Fue designado Secretario General del partido, en octubre de 1974, desplazando al histórico Rodolfo LLopis, en el Congreso de Suresnes, donde expresó “el marxismo o yo”. Su cargo fue confirmado en el Primer Congreso celebrado en España, luego de la Guerra Civil (diciembre de 1976) pero en mayo de 1979, renunció cuando un nuevo Congreso se opuso a alejarse del marxismo. Volvió a su cargo en septiembre de ese mismo año, cuando su postura de que el partido abandone el marxismo, fue aceptada.
Fue diputado en 1977, y lideró la oposición hasta 1982, cuando el 28 de octubre, se convirtió por mayoría absoluta, en Presidente del Gobierno español, por el 48,11 % de votos. Su Vicepresidente fue Alfonso Guerra, consiguiendo su partido ingresar 202 diputados al Congreso.
Se mantuvo en el poder hasta 1996 luego de ser reelegido en 1986, también por mayoría absoluta, consiguiendo ingresar 184 diputados. En 1989, si bien no logró la mayoría absoluta, por un diputado, pudo incorporar la mitad de los integrantes del Congreso (175 diputados). Sin embargo iba perdiendo electores, ya que en 1993, si bien venció en las urnas, consiguió 151 escaños, frente a los 141 que obtuvo el Partido Popular. Éste fue el partido que se impuso en 1996, ingresando 156 diputados, frente a los 141.del PSOE.
Durante su moderada gestión gubernamental, fue económicamente liberal, impuso impuestos más altos a las clases más favorecidas, modernizó las infraestructuras, las industrias, el sistema de seguridad social y la educación, con los Fondos para el Desarrollo otorgados por la Comunidad Económica Europea, a la que se incorporó en este período (1985) pero además endeudó al estado. Expropió el holding de empresas “Rumasa” por decreto del 2 de febrero de 1983, alegando que estaban en riesgo de quiebra y habían realizado ocultamiento de datos.
Se distanció de la UGT, Unión General de Trabajadores, creada por Pablo Iglesias, también fundador del PSOE, en ese momento liderada por Nicolás Redondo, pues el sindicato le realizó dos huelgas generales, en 1988 y 1994, a causa de la flexibilización laboral, por él impuesta
Durante el gobierno de Leopoldo Calvo-Sotelo, fue contrario a que España se incorporara a la OTAN (1981) pero luego durante su gobierno, defendió la permanencia, convocando un referéndum en 1986, que le brindó apoyo popular. Fortaleció las relaciones con Estados Unidos, con los países europeos y latinoamericanos, e hizo intervenir a su país activamente en la Guerra del Golfo de 1991.
Adhirió al tratado de la Unión Europea o Tratado de Maastricht, suscripto el 7 de febrero de 1992, que reemplazó la Comunidad Económica Europea por la Unión europea, que fijó objetivos más allá del ámbito económico, en vías a la integración, social, política y económica de los países de Europa. Esto obligó a España a realizar sacrificios para adecuarse a los objetivos propuestos.
En 1992, España se mostró ante el mundo como un país democrático y progresista, celebrando los quinientos años del descubrimiento del continente americano, los Juegos Olímpicos en Barcelona y la Exposición Universal de Sevilla.
Hacia 1993 la deuda había crecido considerablemente, al igual que los índices inflacionarios y las tasas de desempleo, lo que le impidió en las elecciones de ese año obtener la mayoría absoluta, aunque siguió en el gobierno. En 1994, los datos habían comenzado paulatinamente a revertirse, pero el partido sufrió una división entre sus miembros.
Lo que precipitó el derrumbe de la credibilidad gubernamental fueron las denuncias de corrupción y el terrorismo de estado que con la excusa de luchar contra ETA, afectó a personas involucradas en distintas actividades políticas, sin relación con el terrorismo. Fue el GAL el instrumento de que se valió el gobierno para llevar adelante estos secuestros, asesinatos y torturas, en diversos lugares del país, y sobre todo en el País Vasco Francés.
Las elecciones de 1996, consagraron el triunfo de José María Aznar, del Partido Popular.
Renunció en 1997, a su cargo de Secretario General del PSOE, durante el desarrollo del XXXIV Congreso, realizado en Madrid, los días 20 al 22 de junio. Su reemplazante fue Joaquín Almunia.
Luego de actuar políticamente como diputado, se alejó poco a poco de la vida política, aunque permaneció como integrante del Comité Federal y del Consejo de Política Internacional del PSOE siendo Presidente de la Fundación Progreso Global y Presidente de Honor de la Fundación Tomás Meabe.
Recibió el premio “Ramón Rubial” 2007, por su defensa a los valores socialistas, los mismos por los que luchara Ramón Rubial.
Fue designado por el Consejo Europeo reunido en Bruselas, el 14 de diciembre de 2007, para presidir el Comité de Sabios para estudiar la marcha y plantear los objetivos de la Unión Europea proyectado a la década 2020-2030. Deberán presentar un informe sobre el tema en junio de 2010. El actual Presidente Zapatero, y desde la oposición, Mariano Rajoy, han mostrado beneplácito por el nombramiento.