Samnitas
Los samnitas, descendientes de los sabinos, eran un pueblo enemigo de Roma, que le habían negado ayuda para luchar contra los galos, que estaban radicados desde el siglo VII a. C al sur del Lacio, en una región montañosa llamada Samnia, que al principio no tenía salida al mar.
Hablaban una lengua indoeuropea llamada osco. Su organización era tribal, compuesta por lo menos de cuatro tribus: la tribu más importante ubicada en la zona central era la de los Pentri; al norte se ubicaba la tribu de los Caracenos; al sur la de los Hirpinos; y al suroeste la tribu de los Caudinos. Estas tribus se aliaron y establecieron su capital en Boviano.
Eran pastores y guerreros, que buscaban nuevas tierras con fines de pastoreo. En el siglo VI a. c. ocuparon Pompeya y recientemente se han encontrado, producto de excavaciones arqueológicas, objetos de arcilla, dedicados al culto de su diosa del amor (Mefitis) y elementos de un baño ritual.
Siendo vecinos de los griegos, a partir del siglo V a C. los imitaron, y construyeron ciudades fortificadas, comerciaron con los helenos, y aprendieron de ellos técnicas de guerra, las cuales emplearon contra algunas colonias griegas. Establecieron en Capua su capital a partir de entonces.
Romanos y samnitas lucharon hasta el año 290 a. C, donde los romanos se aliaron a los habitantes de Campania, que eran hostigados frecuentemente por los samnitas.
Los samnitas vencieron a los romanos en el año 321 a. C. en la batalla de las Horcas Caudinas y unidos a etruscos, umbrios y sabinos lograron en el año 298 antes de la era cristiana organizar una coalición contra los romanos. Sin embargo esto fue su fin, La Batalla de Sentinum firmó su extinción, ya que las tropas romanas lograron apoderarse del territorio samnita diezmando y dispersando a sus habitantes. El territorio fue colonizado.
Sin embargo, aliados con Pirro y luego con Aníbal siguieron hostiles al dominio romano.