Eduardo Lonardi
Eduardo Ernesto Lonardi, nació y falleció en Buenos Aires, entre el 15 de septiembre de 1896 y el 22 de marzo de 1956, aunque su carrera militar la inició y desarrolló en la ciudad de Córdoba, donde fue Director de la Escuela de Artillería.
Fue encarcelado en Chile acusado de espionaje en 1942 mientras se desempeñaba como Agregado Militar.
No participó en el golpe militar contra Castillo en 1943, pero sí del golpe frustrado contra Perón en 1951, lo que lo obligó a pasar a retiro. Encabezó el esta vez logrado golpe de Estado contra Perón de 1955, denominado Revolución Libertadora, apoyado por los católicos liderados por Mario Amadeo (Perón se había distanciado de la iglesia al establecer la enseñanza laica y suprimir feriados religiosos) por el ejército al mando del general Aramburu y por la Marina comandada por Isaac Rojas, que se convirtió en vicepresidente de Lonardi. Éste asumió el mando presidencial de facto el 23 de septiembre de 1955, con su salud debilitada.
Era un hombre honrado pero cometió un grave error: designó como colaboradores a personas con ideas antagónicas. Puso a cargo de las Relaciones exteriores a Mario Amadeo; en Trabajo, a Luis Cerutti Costa, en el Ministerio de Guerra, al general Justo Bengoa, todos estos de ideología nacionalista. Sin embargo, les asignó a los liberales ultra antiperonistas, otras funciones relevantes: a Rojas, la de Vicepresidente, a Eduardo Busso, el Ministerio del Interior y a Teodoro Hartung lo designó al frente de la Marina. Este último sector, el liberal, consiguió alejar a Bengoa y reemplazarlo por el general Ossorio Arana. Los nacionalistas, por su parte obtuvieron la separación de Busso, y el nombramiento en su lugar del Dr. Luis María de Pablo Pardo.
Lonardi criticó al gobierno peronista desde su primer discurso, acusándolo de corrupto, irresponsable y despilfarrador. Con los partidos políticos opositores al peronismo y la UCR armó una Junta Consultiva. Disolvió el Congreso, realizó una política austera de reducción del gasto público, y canceló los contratos con la Standard Oil y con el Instituto Argentino de Promoción del Intercambio, realizados durante el gobierno peronista.
Solo pudo mantener el mando presidencial hasta el 13 de noviembre de ese mismo año, por la oposición del propio ejército y la Armada, que criticó su política de reconciliación nacional y pacificación. Entre los opositores, un sector, el liberal, reclamaba medidas duras contra el peronismo (solo había depurado de peronistas, la Corte Suprema, los gobiernos provinciales y las embajadas) y no estaban de acuerdo con las palabras del presidente “ni vencedores ni vencidos”; mientras que otra parte apoyaba la conformación de un Estado totalitario. Por otra parte, el sector liberal quería ingresar al Fondo monetario Internacional (FMI) aceptando sus condicionamientos.
El general Pedro Eugenio Aramburu, lo reemplazó en el mando el 13 de noviembre de 1955, manteniendo a Rojas como Vicepresidente, iniciando una etapa encarnizadamente antiperonista.