Virrey Cisneros
Baltasar Hidalgo de Cisneros, nació en la población española de Cartagena en 1755 y falleció en la misma ciudad en 1829. En la historia de la América Colonial es recordado por ser el último virrey del Virreinato del Río de la Plata. Fue un notable marino y militar que participó en episodios históricos decisivos tanto en la historia de España como en la de la incipiente nación Argentina.
A los quince años inició la carrera naval y sirvió en diferentes naves en importantes misiones de rescate en Argel y Melilla. En 1790, un año después del estallido revolucionario en Francia tomó parte activa en la guerra contra el país galo hasta el año 1795.
En el año 1805 fue un protagonista destacado en la Batalla de Trafalgar, en la que se enfrentaron el Reino de España aliado con el Imperio Francés frente al Reino Unido, y donde Cisneros fue hecho prisionero. Destacando en este episodio como general y jefe de escuadra estuvo a bordo del navío Santísima Trinidad donde fue partícipe del conflicto en primera línea de fuego. Se comenta que como consecuencia de esta batalla desarrollo un importante grado de sordera por haber estado muy cerca de un cañón al producirse el disparo.
En 1808 participó activamente en la resistencia frente a la invasión napoleónica del Reino de España armando navíos y suministrando armas y municiones a la toda zona del Levante Español.
Pero el destino aún habría de otorgarle un importante papel histórico aunque efímero en los dominios coloniales de la Monarquía Hispánica. En 1809 es nombrado virrey del Río de la Plata para sustituir a Santiago de Liniers, cargo en el que sólo perdurará hasta 1810. Cisneros es nombrado administrador colonial en el período más crítico de la presencia española en América: los prolegómenos de los movimientos emancipadores.
Llegado a Montevideo en el mes de junio de 1809 disolvió la Junta y rearmó las milicias españolas puestas fuera de combate tras la revuelta de Martín de Álzaga y absolvió a los responsables.
Las derrotas de la marina española frente a la escuadra británica paralizaron el comercio de la metrópolis con las colonias. Para intentar congraciarse con la clase criolla más favorecida, Cisneros autorizó el libre comercio con Gran Bretaña no sin ciertas reticencias de aquellos que se lucraban con el contrabando.
En el año 1809 aprovechando el vacío de poder en España motivado por la invasión de Napoleón Bonaparte, se producen en Bolivia algunos intentos de revolución que dieron lugar al nacimiento de juntas de gobierno. Pero estos intentos emancipadores fueron sangrientamente reprimidos por un ejército enviado por el virrey Cisneros. Pero lejos de amedrentar las ansias revolucionarias en los dominios coloniales de la corona española, éstas fueron en aumento.
El virrey Cisneros consciente de la repercusión que podría provocar en el Virreinato las noticias procedentes desde España intentó establecer una férrea censura en la prensa. Sabedor de que el sometimiento de la corona española a las tropas napoleónicas podría provocar un levantamiento imposible de detener.
Y así sucedió. Algunos ejemplares de periódicos retenidos por las autoridades españolas cayeron en manos de Manuel Belgrano y Juan José Castelli y en ellos se difundía la noticia de la supremacía de Napoleón en España y el sometimiento de la Monarquía Española al Imperio Napoleónico.
En la semana que va del 18 de mayo al 25 de mayo de 1810 y que se conoce como la Revolución de Mayo se establece en un Cabildo Abierto una Junta de Gobierno para decidir el destino de la colonia. Cisneros intentó nombrarse presidente de la misma mientras no se clarificara la situación en la Península Ibérica, pero carecía de los apoyos necesarios dado el clima anticolonial imperante en Buenos Aires.
Forzado por la situación y ante la imposibilidad de reestablecer la preponderancia española en el Virreinato del Río de la Plata abandona el territorio en un navío mercante que lo traslada a las Islas Canarias y amarra el 4 de septiembre de 1810. Allí se recupera de su maltrecha salud. Hasta 1812 permanece retenido en el arsenal de la Carraca, Cádiz, del cual sale cuando el rey Fernando VII jura la constitución de 1812. Un tiempo después se reintegra en la vida militar y política española.
Después de su etapa como virrey en América ocupó varios cargos en España entre ellos el de ministro de Marina en 1818 y el de comandante de una expedición fracasada en 1820 enviada para reconquistar el antiguo Virreinato del Río de la Plata.
Falleció en la ciudad donde había nacido el 9 de junio del año 1829.