Los zulúes en África
Tienen el privilegio de ser en Sudáfrica la primera minoría y una larga y heroica historia. Son alrededor de 10.000.000, pertenecientes al grupo de los bantúes, y están situados en la zona sureste del continente y noreste de Sudáfrica, sobre todo en KwaZulu-Natal o conocida en español como Zululandia, en la provincia de Natal, lugar que consideran su patria.
Tienen costumbres y creencias religiosas mágicas ancestrales, que se han mezclado con el cristianismo que muchos han adoptado. Tienen una música propia, el isigubudu, que es conocida y ejecutada en occidente. Su idioma es el nguni.
Uno de sus grandes líderes, fue Shaka Sulu; el que hizo surgir al pueblo zulú como potencia en el año 1816, que logró unificar a las tribus zulúes en una confederación de 250.000 personas con un poderoso ejército, donde participaba casi toda la población organizados por edades, a la que se entrenaba en tácticas militares y en lucha cuerpo a cuerpo, y en el manejo de cortas lanzas de hoja ancha. Esto culminaba la tradición guerrera de la etnia, pues aunque eran un pueblo de pastores, la guerra siempre estuvo presente en su idiosincrasia, lo que los convirtió en un imperio que dominó a las otras tribus.
Shaka Sulu intentó arribar a acuerdos con los británicos y con los boers (descendientes de holandeses) que allí residían, pero no tuvo éxito. Pereció asesinado por sus hermanastros en el año 1828.
Los zulúes debieron resistir a los británicos que pretendían dominarlos desde 1877, aunque éstos lograron vencerlos en 1879, bajo el liderazgo de Cetshwayo, en la batalla de Ulundi, terminando con la independencia de los zulúes que pasaron a depender de los ingleses. En 1887 y en los primeros años del siglo XX organizaron revueltas contra los ingleses pero fueron reprimidos.
En el siglo XX, la lucha de los zulúes por su autonomía continuó. A pesar de la represión y la discriminación, los zulúes mantuvieron viva su cultura y su identidad. La resistencia zulú se convirtió en un símbolo de la lucha contra el apartheid en Sudáfrica. En 1994, con el fin del apartheid, los zulúes obtuvieron el reconocimiento oficial de su lengua y su cultura.
La sociedad zulú se organiza en clanes, cada uno liderado por un jefe. Los clanes están compuestos por varias familias extendidas, y la lealtad al clan y al jefe es un valor fundamental. La vida social y religiosa de los zulúes está profundamente arraigada en sus tradiciones ancestrales. Celebran numerosas ceremonias y festivales a lo largo del año, que marcan los momentos importantes de la vida, como el nacimiento, la iniciación a la edad adulta, el matrimonio y la muerte.
La economía zulú se basa en la agricultura y la ganadería. Cultivan maíz, sorgo, frijoles y calabazas, y crían ganado, ovejas y cabras. El ganado tiene un valor simbólico y económico importante, y se utiliza en ceremonias religiosas y como dote en los matrimonios.
Los zulúes son famosos por su arte y su artesanía. Crean hermosas piezas de cerámica, cestas de mimbre, joyería de cuentas y esculturas de madera. La danza y la música zulú son reconocidas en todo el mundo. La danza zulú, llamada indlamu, es una danza de guerra que se realiza en ceremonias y festivales. La música zulú se caracteriza por sus ritmos complejos y su uso de instrumentos tradicionales, como el tambor y la marimba.
Hoy en día, los zulúes siguen luchando por sus derechos y por la preservación de su cultura y sus tradiciones. A pesar de los desafíos, los zulúes se mantienen firmes en su identidad y orgullosos de su herencia.